Con la intención de lanzar próximamente una nueva gama de vehículos de propulsión alternativa, Hyundai sigue situándose varios pasos por delante frente a la competencia en lo que a la movilidad del futuro se refiere. En 2013, la compañía sorprendió al mundo con el anuncio del comienzo de la producción en serie de su primer coche con tecnología de hidrógeno producido a gran escala: el Hyundai ix 35 FCEV. El modelo se convirtió en un hito en la movilidad ecológica del futuro, campo en el que Hyundai ha seguido avanzando desde entonces.
El SUV, renombrado como Tucson Fuel Cell una vez comercializado, ha sido el encargado de introducir la celda de combustible de hidrógeno como sistema de combustión. Sus numerosos beneficios ecológicos frente a la combustión tradicional, se suman a las mejoras en materia de comodidad y autonomía de los vehículos 100% eléctricos. Y así es como Hyundai ha desarrollado el coche del futuro, un coche ecológico que no contamina y con una autonomía sobresaliente tanto para el día a día, como para trayectos más largos.
El Hyundai Tucson Fuel Cell fue sin duda un vehículo pionero, adelantado a su tiempo, que ha sido el banco de pruebas perfecto para que la compañía avanzara en la tecnología de hidrógeno, el considerado como combustible del futuro. Pero este futuro cada vez parece más cercano y el nuevo modelo de Hyundai es buena prueba de ello. Presentado en el Salón de Ginebra 2017 y confirmado en el CES Las Vegas de 2018, el nuevo Hyundai NEXO forma parte del plan de la marca para introducir hasta 18 vehículos ecológicos de cara al año 2025, y conseguir así un medio ambiente más limpio.
Vehículos que no contaminan, con la misma autonomía que los vehículos de combustión tradicional, seguros y con la máxima comodidad de repostaje. Así son los vehículos ecológicos por los que apuesta Hyundai, y así es el nuevo NEXO, que llegará al mercado a lo largo de 2018.
Así funciona un coche de hidrógeno
El nuevo Hyundai NEXO incorpora todas las ventajas que un vehículo de hidrógeno puede ofrecer. Y ante la pregunta de cómo funciona un coche de hidrógeno, Hyundai responde con su renovada segunda generación de pila de combustible. Un nuevo vehículo más grande, más seguro, más potente y con mayor autonomía que el Tucson FCEV. El Hyundai NEXO llega para quedarse.
En este nuevo modelo, la marca ha incluido mejoras tanto en la aceleración, la potencia y la autonomía, que llega hasta los 596 kilómetros, 168 más que su predecesor. Además, se ha puesto a prueba en condiciones extremas y es capaz de arrancar en temperaturas de hasta -29 ºC en un tiempo inferior a 30 segundos, tiempo líder en la industria. El resto de mejoras desarrolladas por Hyundai tienen que ver con el sistema de suministro de aire, el rendimiento a grandes alturas, los tiempos de repostaje, la densidad de energía y la durabilidad en comparación con los vehículos a gasolina.
El funcionamiento de un coche de pila de combustible, simplificado al máximo, sería el proceso electroquímico que se produce al mezclar hidrógeno con oxígeno y que provoca la propulsión del vehículo. Durante esa mezcla, se genera una electricidad que pasa a unas baterías y de las baterías al motor, con la única emisión de vapor de agua y nitrógeno. Para este proceso se necesitan una serie de componentes que Hyundai ha integrado a la perfección en el nuevo NEXO para refinar su comportamiento.
Hyundai NEXO forma parte del plan de la marca de introducir hasta 18 vehículos ecológicos hasta el año 2025
El conjunto de piezas que propulsan al Nuevo NEXO está compuesto de un motor eléctrico de 120 kW (163 CV), una batería de 40 kW y una pila de combustible de 95 kW, todo ello alimentado por unos tanques de hidrogeno que pueden ser recargados en apenas 5 minutos. Una vez puesto en marcha, la tecnología del Hyundai NEXO funciona con absoluta finura, siguiendo un simple proceso que mueve el vehículo con total respeto hacia el medio ambiente.
El proceso sería el siguiente:
1. El hidrógeno almacenado en el tanque abastece la pila de combustible.
2. Se proporciona un influjo de aire al conjunto de celdas de combustible.
3. La reacción del oxígeno del aire y el hidrógeno almacenado dentro de las celdas genera electricidad y agua.
4. La electricidad generada abastece el motor y la batería.
5. El agua sobrante se expulsa.
¿Cómo y dónde se reposta un coche de hidrógeno?
El hidrógeno está considerado como el combustible del futuro, por lo que cada vez son más las gasolineras que posibilitan el repostaje de este tipo de vehículos con total facilidad y rapidez. El nuevo Hyundai NEXO es capaz de llenar su depósito en menos de 5 minutos.
El depósito de hidrógeno presurizado que equipa el nuevo Hyundai NEXO facilita la carga de hidrógeno de una forma rápida y segura. El repostaje es tan sencillo como cualquier otro tanque de combustible tradicional en una estación de servicio tradicional. La manguera de hidrógeno se mantiene perfectamente sellada al depósito hasta completar el repostaje de los tanques. De esta forma, las Estaciones de Hidrógeno, cada vez más extendidas a nivel internacional, no llevan consigo apenas cambios en comparación con las populares estaciones de servicio y los surtidores de gasolina y gasóleo.
La tendencia hacia una movilidad ecológica no solo cuenta con el apoyo de fabricantes de automóviles como Hyundai. Otras instituciones y entidades colaboradoras, están concienciadas del potencial del hidrógeno como combustible alternativo. Por ello, ya se manejan numerosos incentivos y propuestas para extender la infraestructura de hidrógeno a través de la red de carreteras de todo el mundo.
El hidrógeno, un combustible seguro
El Hyundai NEXO forma parte del ambicioso plan de la marca que parte de una perspectiva de tecnología de vanguardia y respeto por el medio ambiente. Con su apuesta por el hidrógeno, la compañía ofrece una movilidad sostenible y apoya el desarrollo de un combustible alternativo y totalmente seguro para sus consumidores.
La seguridad en la utilización de vehículos de hidrógeno comienza por la propia seguridad de este compuesto. El hidrógeno es uno de los elementos más comunes del universo, es el más ligero y, además, no es contaminante. Como todos los combustibles, requiere de una manipulación adecuada. Pero no más allá del apropiado uso que se debe hacer de la gasolina, el diésel o el gas natural. Del mismo modo, los tanques de almacenamiento del hidrógeno están especialmente diseñados para garantizar la seguridad de los vehículos de hidrógeno.
El nuevo Hyundai NEXO, al igual que el Tucson FCEV y cualquier vehículo de pila de combustible de Hyundai, ha sido sometido a exhaustivas pruebas de seguridad, incluyendo evaluaciones de todos los componentes del vehículo. Las pruebas de choque, tanto frontales como laterales y traseras, confirman la seguridad del Nuevo NEXO, un vehículo que incorpora sensores de impacto que detienen la liberación de hidrógeno de los tanques para minimizar riesgos.
Si el propio hidrógeno es un elemento seguro y los coches que lo utilizan han ratificado su seguridad, los tanques de almacenamiento no pueden ser menos. Fabricados en una aleación de aluminio y un compuesto de carbono, deben superar numerosas pruebas de seguridad antes de ser aprobados para su producción en serie. El test de fuego es una prueba imprescindible que todo tanque debe pasar, puesto que solo así se confirma su capacidad de soportar las presiones más altas. Hyundai también examina su seguridad con pruebas de derrame en caso de accidente o fuga de combustible. Situaciones ante las que se minimiza el riesgo de explosión gracias a los sensores que detectan cualquier fuga, avisan del peligro y, en caso de ser necesario, se pasa a eliminar el hidrógeno de forma segura.
Para Hyundai, el nuevo NEXO supone un paso más en el lanzamiento de coches de propulsión alternativa que llegará al mercado a lo largo de 2018 equipado con lo último en tecnología, conectividad y seguridad.